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Se pueden leer frases como “plata o plomo” por todas partes y el menú contiene platos con nombres como los pollos Pepe y Tata la vegana. Todo el restaurante gira alrededor de la historia del narcotraficante y hace apología a los crímenes del capo.

María Isabel Cajiao, una colombiana que reside en la capital catalana, ya había observado el restaurante, pero solo hasta este lunes pudo ingresar y confirmar que se trataba de un culto a la mafia. Con indignación tomó fotografías del local, pudo interactuar con un empleado y realizó la denuncia en redes sociales.

La versión del empleado es que el restaurante abrió sus puertas en el pasado mes de diciembre, además él no sabe quién es el propietario. “Estas son las cosas que uno no se puede callar y por eso lo hice público”, cuenta Cajiao, quien ve en esto “una burla y una apología a Escobar como si fuera un gran artista”.

Al parecer, el restaurante lleva abierto desde el diciembre pasado y no se conoce la identidad del dueño.