Shakira se regala un momento zen: bronceado y meditación en playas mexicanas tras su concierto en Torreón
Luego de su vibrante presentación en Torreón, donde el impacto del show fue elevado gracias a la participación energética de Pitbull como telonero, Shakira decidió regalarse una pausa muy necesaria
La cantante fue vista sola, practicando yoga, meditando y bronceándose en una tranquila playa del mar de Cortés, luciendo un estilo natural, sin maquillaje y con un atuendo sencillo, inmersa en una atmósfera de intimidad y relajación absoluta.
Las imágenes captadas por medios locales retratan a la artista en un entorno pacífico, con los pies en la arena y la mirada hacia el horizonte, como si aprovechara la fuerza renovadora del sol y el mar entre sus compromisos artísticos. Se trata de un instante de conexión consigo misma, lejos del bullicio escénico y los reflectores.
Después de haber brillado sobre el escenario del Estadio Corona de Torreón, donde interpretó sus éxitos acompañado por los ritmos de Pitbull —quien encendió al público con canciones como Don’t Stop the Party, On the Floor, I Like It, Suavemente y Gasolina—, la intérprete de Las Mujeres Ya No Lloran se toma este descanso antes de continuar su gira, que sigue con una fecha programada en Monterrey el próximo 23 de agosto.
La pausa de Shakira no solo refleja el cuidado por su bienestar físico y emocional, sino también el equilibrio que busca mantener entre el intenso ritmo de la gira y momentos de introspección personal. Para muchos artistas, dichos paréntesis en escenarios naturales cobran valor como espacios de recarga y claridad creativa
Su gira mundial Las Mujeres Ya No Lloran ha sido un éxito rotundo. Según fuentes confiables, con más de dos millones de boletos vendidos en 66 shows, es una de las giras más potentes del año. El tramo latinoamericano ha sumado multitudes y récords, elevando la influencia de la barranquillera en la industria musical.
Foto: Instagram
La imagen de Shakira meditando entre sol y arena habla del poder de la pausa en medio del caos profesional. Consciente de su energía, la artista privilegia esos espacios íntimos para reencontrarse con su calma, antes de volver con toda la fuerza al ritmo espectacular que caracteriza a su gira.