DEPORTE
Publicado 7 octubre, 2016
El búlgaro Grigor Dimitrov, número 20 de la clasificación de la ATP, eliminó este viernes al español Rafa Nadal, segundo cabeza de serie y número cuatro del ránking, en cuartos de final del Abierto de China que se disputa en Pekín, por 6-2 y 6-4.
Nadal, ganador del torneo de Pekín en 2005 y otras dos veces finalista, estuvo especialmente errático en su servicio y sucumbió ante un Dimitrov muy inspirado, que llevó el peso del partido, y le derrotó en poco más de una hora y media. Empezaron intercambiando dos roturas de saque, pero el búlgaro se asentó a partir de su tercer ataque, imprimió un punto más de velocidad a sus servicios -que superaban con frecuencia los 200 kilómetros por hora- y cobró ventaja en el marcador.
Nadal no pudo ganar ninguno de sus saques en el primer set y, de hecho, no se anotó uno de sus servicios hasta el tercer juego del segundo, pero el búlgaro respondió con un servicio «limpio» que cortó las aspiraciones de su rival. Pese a que Nadal trató de remontar a última hora, Dimitrov fue capaz de resistir su reacción y se apuntó su primera victoria contra el actual número cuatro del mundo en ocho enfrentamientos.
Con su derrota de este viernes, el español se complica sus opciones de estar en el Masters de Londres, puesto que, además, coincide con la victoria de uno de sus competidores, el francés Gael Monfils, en el torneo de Tokio.
El tenista búlgaro Gregor Dimitrov, quien definitivamente se convirtió en la sorpresa de los cuartos del Abierto de China en Pekín, calificó la victoria como «una de las mejores» de su carrera, y dedicó palabras de admiración al mallorquín, quien según confesó ha sido muchas veces su fuente de inspiración. «A veces lo utilizo como inspiración cuando estoy mal en un partido. Para mí, es uno de los mejores jugadores con diferencia», destacó Dimitrov, quien se medirá en semifinales de Pekín al canadiense Milos Raonic.
Dimitrov, que en sus siete anteriores duelos con Nadal había cosechado derrotas confesó que vencer al español había sido uno de sus «objetivos». Subrayó que había firmado un juego «excelente», destacó que en el partido de hoy se mostró «más agresivo» que en otras ocasiones, y confesó que intentó «provocar» a Nadal para que desarrollara alguna de sus jugadas favoritas.
La otra semifinal emparejará a Murray, verdugo en cuartos de su compatriota y amigo Kyle Edmund, con Ferrer, que se deshizo del alemán Alexander Zverev, reciente ganador del torneo de San Petersburgo con 19 años.
Murray, doble campeón olímpico, se impuso por 7-6 (9) y 6-2 a Edmund, número 54 del mundo, en un partido en el que se mostró más seguro que en las eliminatorias previas. Su próximo rival, Ferrer, tuvo que sufrir más para imponerse a Zverev, una de las mayores promesas del circuito, y le tocó remontar para ganar finalmente por 6-7 (4), 6-1 y 7-5.
«Del fondo de la pista ha sido el mejor partido del año», aseguró Ferrer, en declaraciones a los periodistas en Pekín. «Ha sido un partido muy duro. Zverev es un jugadorazo, me lo ha puesto difícil en todo momento y en el tercer set me ha tenido dos ‘breaks’ arriba», comentó el español.
En el cuadro femenino, las semifinales quedaron definidas con emparejamientos entre la polaca Agnieszka Radwanska, tercer favorita, y la ucraniana Elina Svitolina, decimosexta cabeza de serie, y entre la británica Johanna Konta, undécima favorita, y la estadounidense Madison Keys, cabeza de serie número ocho.
«Del fondo de la pista ha sido el mejor partido del año. Ha sido un partido muy duro. Zverev es un jugadorazo, me lo ha puesto difícil en todo momento y en el tercer set me ha tenido dos ‘breaks’ arriba» – David Ferrer.
