Hay dos cosas que unen a Margarita Saieh y Jaime Jassir: un amor de cincuenta y cinco años de casados y el gusto por hacer bien las cosas. Historia de una enriquecedora combinación.
Estos propósitos han marcado su camino. Es por eso que le han puesto este sello característico a su marca, Margarita Saieh de Jassir, una repostería que ha funcionado en la Costa por más de 22 años bajo los siguientes criterios: estimular la calidad humana como un servicio para sus clientes, resaltar la importancia de los valores familiares y enfocarse en perfeccionar la calidad en sus productos.
Como en muchas de las grandes pastelerías del mundo, su historia se gesta desde la cocina familiar. La transición fue necesaria, pues de un momento a otro pasaron de una pequeña empresa en casa a un negocio familiar que se extiende en toda una región. Era el año 1997 cuando en su casa ubicada en la calle 90 con carrera 57, la señora Margarita Saieh de Jassir empieza a preparar sus tortas de manera informal, para ocasiones especiales, por pedido de sus vecinas y amigas.
El rumor del sabor y la calidad de sus productos empezó a tomar forma, al punto que un año después ya estaba habilitando su casa como el primer punto de venta y luego de tres años, se abre paso un segundo punto de negocios en la calle 79 con carrera 51.
De forma paulatina el negocio se convierte en una institución en la ciudad, y en la actualidad vemos romerías de clientes satisfechos en más de sus 33 puntos de venta ubicados del norte al sur de la ciudad de Barranquilla con alcance en algunos pueblos de la periferia y en otras dos ciudades principales del Caribe colombiano: Santa Marta y Cartagena.