Por Jocelyn González
Esta medida restrictiva ha generado una dinámica masiva nunca antes vista en el ámbito educativo: los niños estudian desde casa y son sus padres —o familiares— quienes los guían en el proceso. Esta experiencia, que le ha ‘tocado’ a millones de colombianos, se basa en el modelo de ‘homeschooling’, ‘homeducation’, o lo que es lo mismo que educación en casa o en el hogar, pero bajo el tipo de educación curricular, que es aquella que reconoce la estructura curricular existente en las escuelas y en la cual son los padres quienes dirigen a sus hijos en todo el proceso de enseñanza-aprendizaje.
En esta ocasión, Julieta compartió con nosotros cómo han sido estos días de impartir, junto a su esposo, el empresario Maurizio Mancini, la educación a su pequeña Olivia, una experiencia que sin duda nos deja ver el gran amor y la unión familiar de los Mancini-Piñeres.
¿Cómo han sido estos días de cuarentena junto a Maurizio y Olivia en casa?
Estos días en casa hemos tratado de estar muy tranquilos, con mucha paciencia, teniendo una nueva rutina y entendiendo que es lo mejor para todos en este momento. No es fácil, pero tener una familia, una casa y estar agradecido por muchas cosas, lo hace más fácil.
¿Cómo ves el tema del ‘homeschooling’ que, debido a la situación actual, no ha sido por elección sino por necesidad?
En mi caso el ‘homeschooling’ ha sido muy bonito poque, primero, he podido estar más tiempo con mi hija y segundo, porque la he podido conocer mucho mejor. He entendido muchas de sus fortalezas y también sus debilidades, y a veces con la rutina ‘normal’ de enviar a los hijos al colegio uno no las ve y no las siente propias. Creo que ha sido un momento bonito para acercarme a ella y para entenderla más.
¿Cómo ha sido para ti y Maurizio la experiencia de impartir la educación a Olivia desde casa?
La verdad no sabemos cuánto vaya a durar esto, pero los dos estamos muy comprometidos con el tema. Ahora hacemos la labor de padres y también de educadores. No es fácil, pero le estamos buscando el lado bueno a toda esta situación y estaremos ayudando a Olivia en todo lo que necesite.
¿Ha sido difícil? ¿Cómo reparten el tiempo?
Nuestra rutina consiste en levantarnos tipo 7:30 de la mañana. Olivia se baña, desayuna y se alista. A las 8:30 a.m. ya estamos conectados en una reunión en Zoom con sus compañeros del jardín durante unos 20 minutos para que se saluden todos. A las 9:00 a.m. empieza la primera clase con todo el material que envía en colegio por escrito, en videos y demás. Allí estamos hasta las 12:30 m. Luego almorzamos en familia y posteriormente ella tiene una hora para que se relaje, en la que puede ver televisión o hacer cualquier otra actividad para que se relaje. En las tardes, tenemos un tiempo de juego en familia, nos inventamos algo para cocinar, armamos rompecabezas o sacamos a los perros. Ese es básicamente nuestro día a día junto a Julieta.
Por otro lado, yo sigo activa en campañas que tengo y también con mi línea de productos naturales de belleza, Naturalia Life, que he podido distribuir desde casa. Mau está trabajando en su línea de congelados, que ha sido muy exitosa. Entonces vamos turnando nuestro tiempo con Olivia de acuerdo a la disponibilidad y si tenemos algo de trabajo. También con nosotros está mi mamá, que ha sido una gran ayuda.
¿Qué balance haces hasta el momento en cuanto al aprendizaje de Olivia? ¿Qué crees que es lo que más ha desarrollado durante esta nueva experiencia?
Con Olivia ha sido todo muy positivo. Primero que todo, ella nos ha enseñado a nosotros muchas cosas, por ejemplo, ella siempre está feliz, todos los días se levanta con una sonrisa gigante y la mejor actitud. Nunca ha preguntado por qué no salimos a algún lado, por qué no va al parque, a sus clases de natación. Para ella, el estar en casa con sus papás y su abuela ha sido un súper plan y eso nos da mucha alegría porque sentimos que a ella no le han estado haciendo tanta falta unas cosas que de pronto a nosotros sí.
Por otro lado, siento que como tenemos más tiempo para leerle, hemos podido trabajar temas de memoria y lenguaje; a ella le encanta y es muy buena para eso. También siento que ella ha tenido más tiempo para ver las cosas que tiene en su casa y para inventarse nuevos juegos, valorar lo que tiene y sacarles más provecho a las cosas, lo que es muy positivo.
¿Qué consejo les das a los madres y padres que se encuentran viviendo esta misma experiencia?
Mi consejo más grande es que primero trabajen en ellos, en la paz y en la tranquilidad en estos momentos tan difíciles, porque los niños energéticamente sienten todo y se lo transmitimos. Si uno está alterado, por más que queramos jugar y hacer cosas con ellos, van a percibir esa energía. Es importante no estar todo el tiempo hablando de las dificultades en frente de ellos.
También es muy importante establecer una rutina, saber en qué se va a utilizar el tiempo. A no ser tan estricto. Yo, por ejemplo, antes era muy estricta con el tema de la televisión, pero he tenido que ceder un poco más en esto, porque entiendo que al no poder estar con sus amigos y no poder hacer muchas más actividades, necesita cosas con las cuales entretenerse. También poner música, bailar, ver imágenes de naturaleza es importante para mantener la mente sana. Nosotros, por ejemplo, sembramos unas plantas y las cuidamos, actividades que pueden hacer todos en casa y que son muy provechosas.