GASTRONOMÍA
Publicado 2 noviembre, 2017
Pocas cosas son tan deliciosas como los helados, y la prueba está en que seguramente no conoces a nadie dispuesto a rechazar una invitación a comer está deliciosa y sencilla receta, compartida por Crystal Sánchez, desde el portal de Tu Hogar.
Solo necesitarás 3 vasitos de yogur de sabores distintos, 3 quesitos de crema individuales, 150 ml de leche evaporada, 3 cucharadas de miel de abeja, 1 taza de granola, reservando ¼ de taza por cada sabor y otro cuarto para espolvorear al final.
El primer paso consiste en mezclar uno de los yogures de sabor con un quesito crema y 50 mililitros de leche evaporada con licuadora o, si prefieres, ayudándote con un batidor. La idea es integrar todo, de forma tal que llegues a contar con una mezcla homogénea.
A esta mezcla le debes agregar dos cucharadas de miel de abeja, para después agregarle el ¼ de taza de granola. Una vez esté todo añadido, mezcla de nuevo.
Este proceso básico lo repetirás tres veces, es decir, una por cada sabor de yogurt. Cuando hayas terminado esta etapa, deberás verter las mezclas en tu molde, contando así con tres paletas de cada sabor.
Como paso final, espolvorea el cuarto de taza de granola restante sobre la superficie de paletas, y, ahí sí, introdúcelas en el congelador.
En caso de que tu molde no incluya los palitos, no te preocupes: puedes introducirlos por tu propia cuenta, tapando el fondo con aluminio, asegurándote así de que todos queden centrados.
El tiempo de espera no es mucho, así que calma: después de 4 horas puedes sacar los moldes y echarles un poco de agua tibia para que puedas sacarlos de manera más armoniosa.
Eso es todo. Se trata de una receta rápida y segura para divertirse en los fines de semana y, también, para compartir con tus hijos, quienes te agradecerán su delicioso sabor, sin azúcar añadida. ¡A comer!
