La modelo caleña, Carolina Cruz, no solo es una de las mujeres más queridas y deseadas del país, sino todo un ejemplo de fortaleza y fe.
La presentadora y empresaria habló para la Revista Vea sobre su decisión de mantener en privado la llegada de su hijo Matías, de las complicaciones de salud de su suegra y de un complicado diagnóstico al hacerse un chequeo.
“Nos criticaron mucho por redes. Ese primer mes fue muy duro. No quería mostrar a Matías conectado a una bomba de oxígeno, eso no es chévere”, aseguró la presentadora para Vea.
Después de superar este inconveniente en su hijo y cuando acudió al médico para buscar un método de planificación familiar se topó con una sorpresa que no le gustó nada.
Tras una citología, el doctor ordenó hacerle una biopsia y así descartar una enfermedad grave.
“Cuando me operaron me limpiaron por dentro y de una vez me sacaron una muestra para hacerme otra biopsia y ver cómo estaba todo. Tras un nuevo resultado me informaron que debían operarme nuevamente porque quedaron residuos que no se podían dejar”, dijo la modelo.
Pero si quería tener otro hijo, Carolina debería esperar un poco más para operarse, así que decidió hacerse otra biopsia, la tercera, y con el resultado volvió al quirófano en diciembre. Luego de esta intervención, el resultado en la actualizad es positivo.
Sin embargo, meses antes, Olga, la mamá de Lincoln, había fallecido y tuvieron que afrontar como pareja y familia este dolor juntos.
Ahora la pareja disfruta de la Matías, de su alegría y el amor que cada vez es más fuerte y, quién sabe, poder darle la bienvenida a otro integrante.
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