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Lo que está pasando en redes

Publicado 17 junio, 2025


Chespirito: Sin querer queriendo” revoluciona el legado pero desata polémica.

La esperada bioserie Chespirito: Sin querer queriendo — creada por Roberto Gómez Fernández y estrenada el 5 de junio de 2025 en Max (antes HBO Max)— ha generado tanto entusiasmo como controversia al presentar un retrato honesto y también complejo de Roberto Gómez Bolaños


Pablo Cruz Guerrero interpreta a Chespirito adulto (también pasa por roles juveniles y de niño Iván Aragón y Dante Aguilar).

 Fotos: Getty Images

Paulina Dávila da vida a Graciela Fernández, primera esposa de Roberto, Bárbara López encarna a “Margarita Ruiz”, alter ego de Florinda Meza. Otros incluyen a Arturo Barba (Rubén Aguirre/Profesor Jirafales), Miguel Islas (Ramón Valdés), Eugenio Bartilotti (Édgar Vivar) y Paola Montes de Oca (María Antonieta de las Nieves)


La serie recorre desde su infancia en los años 40, sus inicios publicitarios, hasta la creación de El Chavo del Ocho y El Chapulín Colorado. Combina elementos reales y de “fábula”, reflejando un proceso de escritura cuidadoso y fiel al espíritu de Bolaños. No se evita mostrar las tensiones: conflictos con “La Chilindrina”, “Quico” y el divorcio con su primera esposa aparecen con crudeza.


Florinda Meza, que fue pareja y coestrella de Bolaños, no participó y su personaje aparece con nombre ficticio. Meza expresó que “no está contenta”, exige que se respete su historia y mantiene reservas legales. Pese a ello, la producción firmó un acuerdo con los hijos de Bolaños para incluir su figura


Roberto Gómez Fernández defendió la inclusión de Meza con respeto y cariño, pero prefirió no detallar el estado actual de negociaciones legales. El showrunner Rodrigo Santos explicó que el enfoque buscó humanizar al artista, sin canonización excesiva.


La serie promete satisfacer a fans con su homenaje a un ícono de la comedia latinoamericana, pero su tono realista y las tensiones familiares detrás del proyecto han encendido el debate. Entre nostalgias y reproches, Chespirito: Sin querer queriendo se coloca como una producción valiente que revisita un legado con ternura, drama y controversia.

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