María Elvira Cuello: Cuatro hijos y una nueva vida

Todas las madres tienen superpoderes, pero el caso de María Elvira Cuello es extraordinario: quedó viuda a los 31 años con cuatro hijos menores de 10. Ahora es modelo, y se siente lista otra vez para el amor. Esta es su historia.

Por Paula C. Armirola

–Abel, no te vuelvo a repetir.

–Emi, por qué no te has cambiado todavía.

La que habla en imperativo es María Elvira Cuello, la mamá de cuatro niños: Estefanía, Abel, Emilia y María. Nacieron en ese orden en los últimos 11 años, desde que María Elvira tenía 22. Ya tiene 33 años y una historia que se resume simple, pero que pesa cantidades: es viuda.

–Y sería simple si no tuviera 33 años ni 4 hijos.

La que habla sin tapujos es María Elvira Cuello, mientras posa en la sala de su casa, en el norte de Barranquilla, vestida toda de blanco. Le hacemos fotos para esta entrevista porque tiene 33 años, cuatro hijos y una historia intensa.

Abel murió luego de una semana en la clínica, a la que entró por unos cálculos renales, para no volver a salir por culpa de un derrame cerebral. María Elvira vio de pie a su esposo por última vez cuando tenía esa especie de delantal azul con el que uniforman a los pacientes antes de cada procedimiento quirúrgico.

“–¡Cómo te queda de bien el color de esa bata! Todo va a salir bien, que la Virgen te acompañe. Te amo, nos vemos ahorita”.

Ese recuerdo punzante de la última conversación y el de todas las últimas veces con Abel –de Abel con ella, de Abel con los niños–-, los guardó María Elvira en la web, los escribió en un blog. Cuando ya no pudo más guardarse para ella lo que llevaba escribiendo durante meses, lo liberó como una catarsis necesaria.

Su debut en eso de hacer de su vida un diario abierto fue el Día de la Madre del año pasado, escribiendo, en primera persona, su historia en las páginas del periódico más importante del país. Los ‘e-mails´ que recibió de todos cuando la leyeron no la dejaron echarse para atrás. Tenía que seguir. Contando y soltando. Sanando y enseñando.

“En una semana perdí a mi esposo. Entró a la clínica por un cálculo renal y terminó con dos derrames en el tallo del cerebro. Me dejó viuda a los 31 años y con cuatro hijos”.

Así comenzó este relato en primera persona que ya lleva un año, y que acabó convertido en algo más que contar vivencias. Porque María Elvira no cuenta: comparte. Todo, en un universo pintado de morado y azul que terminó llamando ‘MEC’, las iniciales de su nombre, simple y corto, y que ya reúne más de 15 mil seguidores en Instagram (@mecblog), y xxx lectores habituales que cada miércoles esperan el ‘post’ de la semana. Y que ahora estampan carátulas de agendas con frases inspiradoras y el cisne de papel que usó esta diseñadora industrial como logo.

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