Britney Spears desaparece de Instagram en medio de una nueva disputa
La cantante ha vuelto a generar una ola de preocupación entre sus seguidores al desactivar su cuenta de Instagram (donde acumulaba cerca de 42 millones de followers)
La abrupta desaparición de la «Princesa del Pop» de la red social se produce en un contexto de fuertes tensiones con su exesposo, Kevin Federline, y tras haber publicado una serie de mensajes y videos que ya habían encendido las alarmas sobre su bienestar.

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Al intentar acceder a su perfil, los usuarios se encuentran con el mensaje de que «es posible que el enlace no funcione o que el perfil se haya suprimido».
La desactivación de la cuenta de Spears se dio después de días de publicaciones que suenan a descargo personal. En una de sus últimas entradas, la artista de 43 años relató una supuesta caída por las escaleras, mostrando magulladuras en sus brazos. Además, incluyó reflexiones profundas sobre las consecuencias de su antigua tutela:
«Siento que me quitaron las alas y sufrí daño cerebral hace mucho tiempo… Por supuesto, he seguido adelante tras esa etapa difícil de mi vida y me siento bendecida de estar viva», escribió Spears.
Esta acción llega en un momento de conflicto con su exmarido, Kevin Federline, quien publicó un libro de memorias donde expone detalles controversiales de su relación. Fuentes cercanas a Spears afirman que el rapero está «lucrando con su dolor», especialmente tras la finalización del pago de manutención infantil
En sus mensajes, Britney también hizo referencias emotivas a sus hijos, Sean Preston y Jayden James, quienes actualmente residen en Hawái con su padre. No es la primera vez que Britney Spears desactiva su perfil de Instagram, una red social que, desde el fin de su tutela en 2021, utilizaba como su principal plataforma de expresión, a menudo compartiendo videos bailando de forma desinhibida.

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Aunque la cantante había justificado previamente sus videos de baile diciendo que la ayudaban a «recordar cómo volar» y eran su «manera de expresarse y orar», la combinación de los mensajes crípticos, los moretones y la disputa con Federline ha reavivado el movimiento #FreeBritney, con sus fans expresando una gran inquietud por su salud y seguridad personal.