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Publicado 20 mayo, 2016
Por: Raiza Jiménez
A lo largo de la historia, la mujer siempre ha buscado resaltar su hermosura y sensualidad en cada una de las partes de su cuerpo. En la actualidad, toda tendencia de belleza apunta hacia la naturalidad y el encanto de los atributos inherentes a cada persona. Muchos expertos en la materia están de acuerdo en que no existe nada más atractivo que una mujer con un aspecto fresco y saludable, para nada recargado o exagerado.
Los complejos y obesiones por un cuerpo artificial, que en la década de los 90 desencadenaron daños físicos y psicólogicos irreparables, han quedado atrás para dar lugar a un interés femenino por apreciar su cuerpo y hacer resaltar sus cualidades innatas. En el 2016, una nueva generación de mujeres satisfechas con su anatomía y seguras de sí mismas son las que mandan la parada.
Por tal motivo, en el área de la cirugía estética están en auge los procedimeintos poco invasivos, los retoques lo más natural posible y las técnicas poco agresivas. El médico cirujano Alberto Lacouture, del Centro de Cirugía Estética, nos cuenta cómo conseguir un cuerpo armonioso y equilibrado, dando especial importancia a una de las partes más especiales de la anatomía femenina: los senos.
Este tipo de procedimientos favorece a las mujeres con un rango de edad de entre 35 y 50 años, que han quedado embarazadas y experimentado los efectos de la gravedad sobre su busto. Gracias a los avances actuales, es posible contrarrestar este efecto y preservar la función de la lactancia y la sensibilidad de esta zona, según apunta el doctor Lacouture.
“Hace algunos años, los senos grandes estaban de moda, pero actualmente un buen número de pacientes busca un tamaño discreto y una forma estética. Esto ha llevado a que uno de los procedimientos que más realizo en estos momentos sea la reducción del volumen de las prótesis mamarias o el retiro de las mismas”.
El doctor Lacouture añade que, para estas pacientes, el procedimiento ideal es acompañar la reduccion del volumen de la protesis con una mastopexia o levantamiento del seno. “El procedimiento puede ser con cicatriz alrededor de la areola en los casos en que el pecho no esté caído o presente una leve caída, o la mastopexia con cicatriz vertical o en forma de “T” invertida, que permite hacer un levantamiento del pezón y la areola, y darle un aspecto más real”.
Del mismo modo, explica que en el otro grupo de pacientes están quienes desean retirarse las prótesis, ya sea porque sienten que están muy pesadas o se las quieran retirar por gusto propio. “Para estas pacientes, se realiza una mastopexia usando el tejido glandular en la parte de abajo del seno, como relleno del sitio donde se encontraba la prótesis anteriormente. De esta forma, se logra dar un volumen al polo superior del seno, de una forma natural y bella”, concluye el experto.
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